A la luz de una farola
Es medianoche. Los muchachos juegan al escondite por las callejas y los mayores refrescan en las puertas y terrazas. El coro de los grillos, cada año con menos componentes, se escucha a lo lejos. El pueblo huele a sofocante paja. Aunque, si miraran hacia arriba, podrían ver avanzar a Escorpio…