Tubos de esperanza. La restauración del órgano de Cardenete

Tubos de esperanza. La restauración del órgano de Cardenete

La llegada del siglo XVI en España (siendo más honestos, en Castilla) vino con aguas revueltas. Tras la muerte del rey Fernando “El Católico”, su nieto Carlos I, un flamenco que apenas hablaba español al llegar a nuestras tierras, se hizo con el poder de la península ibérica. 

Debido, como siempre, a repartos de poder y reclamación de impuestos en los que no se veían beneficiados, la nobleza castellana se mostró contrariada. Esto encendió una mecha revolucionaria, la Rebelión de los Comuneros, que pronto tornó en un cariz antiseñorial. Cardenete no fue ninguna excepción.

En aquel entonces era parte del Marquesado de Moya. Tras rebelarse la villa de Moya contra el entonces II Marqués, Juan Pérez de Cabrera y Bobadilla, tres mil hombres armados se dirigieron a Cardenete, donde se encontraba el noble. Al ver llegar a la masa enfurecida, el pueblo de Cardenete se unió a la sublevación. Finalmente, como es habitual, los comunes perdieron.

Mapa del Marquesado de Moya en 1752 realizado por D. Rafael Merino Gallo. Manuscrito 7298 B.N. Diccionario Geográfico de Tomás Lopez. Obtenido de http://mlopezmarinhistorialocal.blogspot.com/2020/12/censo-ganadero-y-vecinos-del-marquesado.html

Es en este contexto donde aparece una de las protagonistas de nuestra historia, la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. Promovida por el antecesor de Juan Pérez, Andrés de Cabrera y Bobadilla, I Marqués de Moya, en 1554 estaba finalizada, a pesar de numerosas modificaciones en siglos posteriores. Supongo que ordenar la construcción de esta iglesia no fue suficiente para el pueblo de Cardenete en aquel entonces. Sin embargo, hoy puede ser parte de su salvación.

El origen del órgano de Cardenete

Con un estilo gótico con tintes renacentistas, la Iglesia de la Asunción de Cardenete conserva grandes tesoros en su interior.

Lo más impactante, tras cruzar sus puertas, es el artesonado mudéjar que se posa sobre nuestras cabezas, sólo comparable al de la Catedral en toda la provincia de Cuenca. Sin embargo, podemos disfrutar de un viaje en el tiempo dentro de este templo. Ya en el siglo XVII, se levantó la torre, siendo en el siglo XVIII cuando se decoró con frescos de estilo rococó. En esas mismas décadas surge la guinda del pastel, el órgano.

Órgano de Cardenete, bajo el artesonado de estilo mudéjar. Fuente:Taller de Organería Hermanos Desmottes.Obtenido de https://www.desmottes.org

Construido en 1767 por autor desconocido, se trata de un órgano de la Escuela Castellana, muy similar a otros coetáneos de la provincia de Cuenca, como el de Garaballa o el de  Paracuellos de la Vega.

Sin embargo, los años no pasan en balde, viéndose deteriorado el mueble y el secreto (caja de madera donde se apoyan los tubos) enormemente por la humedad. Como recalca Milagros Herreros Mengual, presidenta de la Asociación de Amigos de la Iglesia de Cardenete: “el órgano ha sido un instrumento infrautilizado desde su instalación, teniendo constancia de su poco uso desde al menos comienzos del siglo XX, cuando no figuraba ningún organista”. Esto favoreció, sin duda, que se acelerara el proceso de deterioro. Además, durante la Guerra Civil fue saqueado y desmontado, quedándose sin tubos, mudo. Había mucho trabajo por hacer.

La restauración del órgano

Con el objetivo claro, la restauración de tan valiosa pieza litúrgica, así como de la parroquia que la acoge, se forma en el año 2010 la Asociación de Amigos de la Iglesia de Cardenete. 

Asociación de Amigos de la Iglesia de Cardenete. Fuente: Liberal de Castilla. Obtenido de https://www.liberaldecastilla.com/milagros-herreros-restaurado-organo-cardenete-programamos-conciertos-creamos-aula-san-marcos-mantenerlo-vivo

Sin embargo, no fue este el primer intento de restauración. Desde 1982, año en el que se declaró a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción Monumento Histórico-Artístico, se produjeron al menos 3 intentos previos, que nunca llegaron a término. “La determinación de Prodese por apoyar esta iniciativa fue crucial para que esta vez sí se consiguiera”, nos recuerda Milagros. Tanto fue así, que en el año 2011 invirtió más de 60.000 euros en este proyecto, siendo prácticamente el 50% de la inversión total. El resto se sufragó entre la Diputación de Cuenca y, como complemento, mediante las donaciones de los vecinos y vecinas del pueblo.

Porque, más allá de las evidentes necesidades presupuestarias, este proceso de crowdfunding que se llevó a cabo en un municipio que no alcanza los 500 habitantes tiene un objetivo aún más importante: la implicación y apropiación de la idea por parte de los vecinos y vecinas de Cardenete. “Poco antes, se había restaurado el tejado de la iglesia y ahí también hizo aportación el pueblo. Ese espíritu y sentimiento de estar haciendo algo por nuestro pueblo ya estaba, la idea de que se iba a formar parte de la historia”, recuerda Milagros. También fue crucial la participación en este proceso de la Peña Los Sanochaores, organizadores de las fiestas, quienes promovieron entre los residentes estivales la importancia de colaborar con esta iniciativa.

A partir de 25 €, cualquier ciudadano podía “adquirir” uno de los 867 tubos que componen el órgano, quedando grabado tu nombre en los mismos. Este curioso micromecenazgo fue conocido como el apadrinamiento de los tubos del órgano. Este precio era el mínimo establecido para los tubos pequeños interiores (en total, 685), siendo mayores los precios para los 28 grandes interiores, valorados en 75 €, los 122 pequeños de fachada, en 120 €, llegando hasta los 32 grandes de fachada, cuyo precio está en 250 €. “Hasta la fecha, se han apadrinado más de 700 tubos, en un pueblo de apenas 500 habitantes”. Eso sí que es participación.

Una vez conseguida la financiación, se comenzó la restauración, de parte del Taller de Organería Hermanos Desmottes S.L. de Landete. Pero más allá de su restauración, lo realmente importante es ponerlo en valor, a través de conciertos o clases. Hasta la fecha, se han realizado más de 40 conciertos, sobre todo a través de diferentes ciclos. De hecho, tanto en el I Ciclo de Conciertos, en 2017, como en el II Ciclo, en 2018, la colaboración de Prodese fue determinante, aportando más del 90% de la financiación en el primero y el 60% en el segundo. “Es una excepcionalidad dentro de lo que Prodese suele hacer, enfocándose en cultura y patrimonio”, inciden desde la Asociación.

Por otro lado, está el Aula de Órgano, iniciativa pionera en la provincia, que estuvo en funcionamiento hasta la pandemia. Uno más de tantas iniciativas culturales que aún no se han recuperado del mazazo que supuso.

Los vecinos, unidos, jamás serán vencidos

No obstante, “el órgano puede constituir un elemento de atracción para un turismo muy específico que movilice la economía local”, afirma Milagros. De hecho, ya ocurre que en los conciertos que se realizan llegan muchos turistas de fuera, lo que dinamiza el pueblo y, sobre todo, lo sitúa en el mapa.

En tiempos en los que la despoblación avanza con ritmo galopante, es más necesario que nunca ser innovadores y utilizar nuestro patrimonio para encontrar nichos de desarrollo rural. Si seguimos ensimismados en las mismas recetas la partida de defunción está ya firmada. Por ello, es de reseñar que Prodese apueste por proyectos de este estilo: pequeñas iniciativas de enorme potencial. La cultura y el patrimonio son llaves de pasado y futuro en los pueblos serranos. Porque sí, hablamos de ecoturismo, pero algo tendrán que poder visitar estos turistas.

Cardenete ha demostrado que cuando se cree en una propuesta, se consigue. Cuando el pueblo se une, es imparable. Más apadrinamientos que habitantes son la irrefutable prueba de esta determinación. Esperemos que empiece a dar sus frutos.

El órgano de Cardenete. Fuente:JCCM.Obtenido de https://www.castillalamancha.es/actualidad/galeriaimagenes/organo-cardenete

Para saber más, puedes descargar el siguiente documento.

Este reportaje forma parte del proyecto “30 años de Leader”, financiado por el Grupo de Acción Local Prodese.

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